¿Cuáles son las funciones del Director de Proyectos en el Sector de la I+D+i? ¿Por qué es tan importante la figura del Gestor de Proyectos en Investigación, Desarrollo e Innovación? A estas preguntas nos responde la empresa BeiNN, integrada en el PCTCLM, que ofrece un curso de Gestión de Proyectos I+D+I, que comienza el próximo 10 de agosto.

El Director de Proyectos de I+D+i no solo debe conocer las buenas prácticas de Project Management para realizar esta correcta gestión, sino también saber cómo adaptarlas a las peculiaridades de estos proyectos.

Una buena gestión de recursos disponibles, una buena planificación y un buen análisis de la situación inicial de partida reducen la incertidumbre de este tipo de proyectos.

Estas  acciones puede ayudarnos de forma muy beneficiosa al cumplimiento de plazos, presupuesto y alcance (aunque este sea cambiante).

Responsabilidades, funciones y habilidades

Los proyectos de I+D+i son proyectos complejos que vienen acompañados de gran incertidumbre con restricciones muy marcadas. Por ello, resulta estrictamente necesario realizar una adecuada planificación y una adecuada gestión de riesgos y de cambios en el proyecto.

Como consecuencia, las habilidades que debería tener un Director de Proyectos de I+D+i no son las mismas que las de un Project Manager de cualquier otro sector.

Director de proyectos I+D+I

Funciones y habilidades necesarias para llevarlas a cabo

  • Habilidades Comunicativas y Criptográficas. El idioma por excelencia de los proyectos de investigación es el inglés: artículos científicos, capítulos de libros, patentes, consorcios con otros países, etc. Los distintos interesados o stakeholders pueden hablar y escribir en inglés, pero no todos tienen el mismo nivel. Muchas veces, el director del proyecto recibe información que tiene que descifrar y entender para no entrar en un bucle de malentendidos al “no hablar el mismo idioma”.
  • Habilidades Creativas. Por definición, los proyectos de I+D+i requieren de una creatividad avanzada que nos permita generar nuevas ideas.
  • Adaptación al cambio. En los proyectos de I+D+i es muy común la replanificación. Se elabora una memoria inicial del proyecto para planificar y, en muchas ocasiones, obtener financiación. Pero, debido a las modificaciones presupuestarias, de cronograma y de alcance, el director del Proyecto debe adaptarse y afrontar esos cambios de la mejor forma posible. 

¿Cómo implementar la gestión de proyectos a I+D+i?

Muchos gestores de proyectos de I+D+i han aprendido sobre la marcha o mediante “prueba-error”, poniendo en riesgo los resultados de sus proyectos y el alcance de los objetivos.

El Project Management mejora y optimiza esta gestión y, algunos de los aspectos que debes tener en cuenta para aplicarlo en tus Proyectos son:

  • Identificar a los Interesados (stakeholders) al Inicio del Proyecto  de I+D+i. Cuantos más factores internos y externos gestiones, menor incertidumbre habrá en tu Proyecto.
  • Establecer un buen objetivo general te facilita pensar en el alcance concreto del proyecto.
  • Asegúrate de que tus objetivos cumplan con el filtro SMART.
  • Desarrolla un plan en el que apoyarte durante la ejecución del Proyecto. Esto, además, te permitirá hacer un adecuado seguimiento y Control de cronograma, presupuesto, recursos…Y te será más fácil desarrollar la Memoria del Proyecto de I+D+i.
  • Asegúrate de recoger criterios de calidad y requisitos del Producto o Servicio que vayas a obtener de tu Proyecto. Solo así llegarás al final del proyecto y podrás cerrarlo.

Buenas prácticas

Si quieres desarrollar de forma óptima tus Proyectos de I+D+i, debes disponer de estos conocimientos y herramientas mínimas de planificación y gestión. Además debes conocer, de forma general, las limitaciones administrativas que afectan a estos proyectos, ya sea por las entidades financiadoras o por las instituciones que desarrollan la actividad científica.

Con “buenas prácticas” nos referimos a aquellas prácticas profesionales que resultan ser las mejores de entre todas las que los profesionales realizan para lograr los resultados esperados.

Una buena práctica puede ser tanto un conjunto de acciones de gran complejidad y multitud como una acción muy sencilla, siempre y cuando sean reconocidas internacionalmente, prácticas y buenas. Esto es lo que sucede con aquellas prácticas recogidas en Project Management.